El Zen es una de las escuelas budistas que más llama la atención en Occidente, sin embargo el Zen es también objeto de numerosas malinterpretaciones que pretenden aislar a esta doctrina del resto de las escuelas y enseñanzas budistas. Tomado una estrofa escrita en la dinastía Tang que describe la esencia de la escuela Chan (como el Zen se llamaba antes de llegar a Japón), Sangharákshita se dispone a comunicar la esencia del Zen. Lo hace de una forma clara y accesible demostrando como el Zen concuerda con la totalidad de la tradición budista y cuales son sus particularidades. La esencia del Zen es en realidad la esencia de budismo, que transciende las palabras y nos indica el sendero de una forma directa y tajante.