2009 ¿Qué es la Orden Budista Occidental?

Un mensaje de Bhante para la Orden

Traducción de Kavindu

El 17, 18 y 19 de marzo, un pequeño grupo de miembros de la orden me presentó una serie de preguntas sobre la naturaleza de la Orden y otros tópicos relacionados, y yo respondí a esas preguntas. Nuestros intercambios fueron grabados, y ya he revisado la transcripción de la grabación, dándole una expresión más clara a algunos de los puntos que quería comunicar, quitando también algunas tangentes que, aunque son interesantes en sí, no tenían una relación directa con las preguntas que se me hacían.

Ahora que me encuentro en mi 84 año de edad, estoy contento de tener la oportunidad de dejar sentada mi perspectiva con respecto a la naturaleza de la Orden, y otros tópicos relacionados. Mis respuestas a las preguntas de hecho podrían ser tomadas como mi Ultimo Testamento y Voluntad para la Orden, y por consiguiente lespido a todos los miembros de la Orden no sólo que lo lean, lo marquen, lo aprendan y digieran internamente su contenido, sino que le den una expresión apropiada en sus propias vidas como miembros de la Orden.

Firmado: Urgyen Sangharakshita

Madhyamaloka

8 de Abril de 2009

Pregunta y Respuestas 17 a 19 de Marzo de 2009

¿Qué es lo que define a la Orden?

Sangharakshita. Básicamente la Orden se puede definir como la comunidad de mis discípulos y de los discípulos de mis discípulos, y de los discípulos de los discípulos de mis discípulos. Y así sucesivamente.

Para comprender esto más plenamente tenemos que regresar a los orígenes de la Orden. La Orden comenzó cuando yo decidí que era necesario un nuevo movimiento Budista, inicialmente en Gran Bretaña. Estaba conduciendo clases de meditación y dando charlas, y llegaba gente que encontraba que mi presentación particular del Dharma les ayudaba a crecer espiritualmente. Entonces me confronté con la pregunta de qué tipo de organización deberíamos tener para estas personas. Estaba bastante claro que había dos modelos que yo no quería seguir. Uno era el de una Sociedad Budista, que simplemente proveía una plataforma para maestros de diversas tradiciones budistas. La otra era el English Sangha Trust, que era un modelo puramente monástico. Por consiguiente, decidí que la estructura debería ser la de una Orden, no una sociedad, pero una Orden que no fuera monástica.

La diferencia entre una sociedad y una Orden era que una sociedad no requería compromisos a nada. Uno se volvía miembro simplemente a través de pagar su inscripción, mientras que una Orden requería que uno hiciera un compromiso definido. Este compromiso era representado, a mi entender, por el ir a Refugio al Buda, Dharma y Sangha, y se emprendía al observar los diez preceptos.

Al fundar la Orden de esta manera simplemente estaba siguiendo un patrón antiguo que encontramos una y otra vez cuando vemos la historia del Budismo. Vemos que surgen maestros, estudian las enseñanzas del Dharma disponibles en su tiempo, entonces dan su propia presentación, y ésta atrae gente; y esto se desarrolla en una Sangha, en una escuela o una tradición. En un nivel más elevado, este patrón fue establecido por el mismo Buda. Comenzó a probar diferentes prácticas y tradiciones de su tiempo que encontró que carecían de algo. Entonces descubrió su propia solución al problema de la existencia, se la enseñó a otros y fundó una Sangha para la gente que atraía.

Esto es exactamente lo que yo he hecho. La Orden es una comunidad de mis discípulos.

P. Dices que lo que has hecho es bastante tradicional. ¿Las diferentes tradiciones y escuelas son usualmente definidas por un solo maestro y continúan siguiendo esta definición a través de cierta cantidad de generaciones?

S. Sí, generalmente sí es así. En el caso de la Sangha Budista en su totalidad, ese maestro único es el Buda Cada una de las Sanghas subsidiarias se formó y reformó a partir de su Sangha original a través de los siglos, y tiene como su principal maestro a quien fue el fundador, aunque no siempre, de esa escuela.

La lección de la historia del budismo parecería ser que necesitas un maestro específico que “define”, para una Sangha en particular. Esta Sangha perdurará como escuela o tradición hasta que se divida o se corrompa y se desintegre. Entonces se requerirá una nueva presentación del Dharma y surgirá una nueva Orden basada en las enseñanzas de un nuevo maestro.

P. Pero hay, por supuesto, otras versiones de lo que define una Orden, o incluso de quién la define, especialmente la perspectiva que podría resumirse en que la Orden es lo que sus miembros colectivamente piensan que es- La Orden colectivamente decide qué es la Orden.

S. No estaría de acuerdo con esto. Mi versión es que directa o indirectamente Yo decido. La Orden no puede ser redefinida democráticamente. La Orden fue fundada por mi como la comunidad de mis discípulos que practican el Dharma de acuerdo con mis enseñanzas. Algunos de estos discípulos son directamente discípulos míos y algunos son discípulos de mis discípulos y así sucesivamente, continuándose en el futuro. Pero, en cierto sentido, todos son mis discípulos directos en cuanto a que siguen mi comprensión del Dharma y el abanico general de prácticas que he enseñado. Pero por supuesto ellos tendrán relaciones como discípulos más particulares o personales con sus propios preceptores privados y públicos.

El deber de mis discípulos es adherirse fielmente a las enseñanzas que han recibido de mí. Practicar fielmente de acuerdo con ellas, y hacer lo mejor que puedan para pasárselas fielmente a otros y, por supuesto, permanecer en contacto personal conmigo y con sus propios preceptores mientras sea posible. Esto es lo que la gran mayoría de miembros de la Orden ya hace, estoy seguro.

P. Hablas de fidelidad. Puede ser fiel un discípulo a ti y a tus enseñanzas y al mismo tiempo ir con otros maestros? ¿Debería la gente decidir si eres su maestro exclusivo o no? No podrían ser guiados e inspirados por ti y por alguien más al mismo tiempo? ¿qué tiene de malo esto?

S. Es cuestión de tener el corazón bien puesto en seguir y practicar una enseñanza, especialmente cuando las enseñanzas de los diferentes maestros son tan diferentes. No puedes practicarlas simultáneamente, y si brincas de uno a otro nunca lograrás ninguna profundidad. La mayoría de los maestros budistas estaría de acuerdo con esto, independientemente de su afiliación particular. Esperan compromiso y lealtad, lo que es algo bastante tradicional.

No estoy diciendo que esto es correcto justo porque otros maestros también tienen esta actitud, sino que mi actitud es bastante tradicional. Mi aproximación proviene de la naturaleza de la vida espiritual en sí. Para que un compromiso sea fuerte tiene, en un sentido, que ser estrecho. Es solamente a través de la intensidad del compromiso a una práctica que se logran resultados. No lograrás esta intensidad si tratas de seguir adiferentes maestros y sus diferentes enseñanzas y prácticas al mismo tiempo.

Necesitas seguir un conjunto de enseñanzas y prácticas en particular, dentro de un marco particular y un maestro particular para poder experimentar algún progreso. Y tienes que tener confianza en ese maestro y sus enseñanzas de otra manera no podrás aplicarte consistentemente y con éxito. Ir a otros maestros es a menudo señal de falta de confianza en lo que uno ya tiene. Este es el caso cuando menos con algunos de nuestros amigos que van a otros maestros, aunque también podría haber otras razones.

P. ¿No podría hacer alguno de tus discípulos de la Orden lo mismo que tu hiciste? No podría ser que, después de practicar tus enseñanzas y bajo la tutela tuya durante muchos años, dijeran que han descubierto su propia aproximación al Dharma y ahora quisieran enseñar esto a otras personas. No podrían simplemente estar haciendo lo mismo que tú hiciste?

S. Cualquiera que haya practicado dentro de la AOBO y encuentre que La AOBO es insatisfactoria tiene, por supuesto, la libertad de comenzar a enseñar a sus propios discípulos y fundar su propia organización, tal como yo lo he hecho. Pero estarían dejando la Orden. No pueden tratar de reunir a un grupo de discípulos a su alrededor dentro de la Orden o movimiento, a quienes les están impartiendo algo que es básicamente diferente de lo que yo he enseñado.

Porque, para ponerlo de manera ligeramente distinta, cada Sangha presupone un Dharma, y cada Sangha particular presupone una presentación particular del Dharma. La Orden y la AOBO presuponen la presentación particular del Dharma que yo he enseñado a través de los años.

P. ¿Podrías precisar más qué quieres decir con “una presentación particular del Dharma? ¿ El Dharma no es simplemente Dharma?

S. Sí, pero el Dharma necesita hacerse específico a una Sangha en particular. Necesita integrarse doctrinal y metodológicamente, para poder servir como base para una Sangha o una Orden. Todo el mundo necesita seguir al mismo maestro fundador, ser guiado por la misma comprensión doctrinal del Dharma, y tomar en general el mismo conjunto de prácticas. Si no lo hacen no tendrán lo suficiente en común para ser una Sangha efectiva, y no podrán progresar juntos en el camino.

Mi presentación particular consiste en aquellas enseñanzas y prácticas que he enfatizado a través de una vida de enseñanzas, habladas y escritas, y espero que también con el ejemplo. Lo que he enseñado pertenece tanto a una comprensión doctrinal, como a una práctica, y es lo que he dicho sobre éstas lo que forma la base del Dharma que es practicado por mis discípulos en la Orden, tal como se lo enseñé – la base de nuestra “presentación particular del Dharma”.

A nivel doctrinal, puedo ver las enseñanzas de pratitya-samutpada

Como las más básicas, y a partir de ellas, siguen las enseñanzas de las Cuatro Nobles Verdades, las Doce y Veinticuatro Nidanas, y también las enseñanzas relacionadas con Nirvana, anatman, y sunyata. Mi enseñanza del Dharma como doctrina está, esencialmente, basada y derivada directa o indirectamente, de estas enseñanzas que, por supuesto, provienen del Buda mismo Y explícitamente excluí aquellas que son incompatibles con ellas.

Mis enseñanzas pertenecientes a un método, y por ende las de mis discípulos, todas se centran directa o indirectamente en el acto de ir a Refugio al Buda, Dharma y Sangha,. Estas comprenden las prácticas que yo mismo enseñé: por ejemplo, la observación de los cinco o diez preceptos; la práctica de las puyas de siete y tres etapas, la práctica de la meditación, dentro del marco del sistema de meditación; el estudio en grupo de las escrituras budistas; el cultivo de la amistad espiritual; el disfrute de la poesía, la música y las artes visuales como ayuda a la vida espiritual. Estas enseñanzas pertenecen al método y están conectadas directa o indirectamente con las enseñanzas del Buda de pratitya samutpada a través de una secuencia de nidanas positivas o espiral, pues todas estas enseñanzas contribuyen de una manera u otra al progreso de mis discípulos a niveles más y más elevados de ser y de conciencia, aún desde lo más refinado de lo mundano hasta lo trascendental. Visto desde otro punto de vista, contribuyen a profundizar en el Ir a Refugio de mis discípulos, de tal manera que de ser provisional se vuelve efectivo, y de ser efectivo se vuelve real en el sentido de ser irreversible.

Uno podría también explorar mi presentación particular del Dharma en términos de los Seis Énfasis Distintivos de la AOBO; sus encabezados son: ecumenismo crítico, unidad, Ir a Refugio, Amistad Espiritual, la Nueva Sociedad, y la cultura y las artes. De estas, mi énfasis en Ir a Refugio es la más esencial y probablemente la más distintiva. Las demás también son distintivas, por ejemplo el énfasis en la importancia de la amistad espiritual ciertamente no es enseñada de manera explícita por ninguna otra escuela budista.

Estas enseñanzas y énfasis junto con todas las instituciones que he establecido, crean en su conjunto algo que realmente no es definible: cierta atmósfera o actitud que se encuentra dentro de la AOBO y en ningún otro lado. Todas ellas contienen una red de amistades espirituales, y éstas han de ser pasadas fielmente de generación en generación a través de una cadena de discípulos.

Un miembro de la Orden es verdaderamente un miembro de la Orden porque acepta dicha definición, y trabaja dentro de ella. Y quiero decir, la acepta efectivamente, a través de una comprensión real de mis enseñanzas, de una práctica activa de los métodos que he enseñado o aprobado, y de la participación diligente en la vida de la Orden que he fundado. Esto es lo que la gran mayoría de miembros de la Orden está tratando de hacer.

El gran peligro para la Orden en el futuro es que haya personas que de hecho ya no sean miembros de la Orden en este sentido efectivo , que ya no sean mis discípulos ni sigan mis enseñanzas, pero que continúen siendo miembros de la Orden nominalmente debido a una confusión en su pensamiento, o en el de los miembros de la Orden alrededor de ellos, o porque les resulte conveniente ser vistos como miembros de una Orden. Quizá tengan muchos contactos en la Orden y en el movimiento, pueden dar clases y construir su propio pequeño círculo, y por ello mantienen su membresía. O el movimiento es el contexto social en el cual han estado por muchos años, y simplemente es la inercia lo que los mantiene en él.

P ¿Pero,  tú mismo tuviste ocho maestros, Bhante? ¿Por qué nosotros no?

S. Aquellos ocho maestros no fueron mis maestros en el sentido que yo soy maestro de ustedes, porque no pertenecía entonces a una Orden de la misma manera que los miembros de la Orden ahora. Cuando me Ordenaron mi principal motivación no era unirme a una Orden; sino ser un monje o bhikkhu, y ser reconocido como tal. Veía a los monjes como practicantes de tiempo completo, y eso es lo que yo quería ser, y había estado tratando de serlo durante los dos años previos. Esto no es, por supuesto, como veo las cosas ahora, especialmente dado que veo muchos monjes que no son realmente practicantes.

En cierto sentido yo aún estaba “picoteando” en aquella época, aún estaba tratando de darle un  sentido espiritual a  lo que me estaba disponible . La situación de los miembros de la Orden es bastante diferente, porque se entiende que ya han “picoteado” incluso antes de volverse mitras. Cuando alguien decide  volverse mitra, bajo las nuevas disposiciones, declara que desea practicar el Dharma dentro del contexto de la AOBO y esto significa que ha dejado de buscar en otros lados. Así que los miembros de la Orden pertenecen a una Orden y han escogido esta Orden en particular en vez de cualquier otra que podría estar disponible. Y al escoger esta Orden significa que me han escogido como su maestro, y que han dejado de picotear en busca de otros maestros fuera de la Orden.

No obstante, el hecho de que sea el maestro de la Orden no quiere decir que los miembros de la Orden no puedan aprender mucho de otros dentro de la Sangha. Recientemente alguien escribió en su carta de renuncia a la Orden que una gran debilidad de la Orden es que solamente hay un maestro. Pero la cuestión no es tan sencilla. Otro miembro de la Orden respondió en Shabda de una manera bastante bella: dejando claro que su lealtad espiritual sí es conmigo, pero también escribió de manera muy conmovedora sobre las diferentes personas de las que había aprendido algo. Señaló que, en cierto sentido, sólo hay un maestro que soy yo, pero uno aprende también de sus preceptores, y de aquellos con quienes estudia y que dirigen clases y demás. Así que no hay un solo maestro en la Orden, en el sentido enque aquel exmiembro de la Orden lo decía. Aquí quizás uno tenga que distinguir entre el maestro principal, fundador, el que define una Sangha en particular, una escuela o una tradición y los maestros inmediatos particulares de uno dentro de esa Sangha.

P. En el árbol del Refugio que ideaste para la Orden, además de tus ocho maestros hay dieciséis maestros del pasado. Cada uno de estos maestros fundó o continuó una tradición en particular, muchas de las cuales aún siguen vivas a día de hoy. ¿Podemos tomar algo de esas tradiciones en particular? ¿Sus enseñanzas constituyen parte de tu presentación del Dharma?

S. No de una manera tan sencilla. Necesitamos ver qué es lo que tenía en mente cuando creé el Árbol del Refugio y puse a esos maestros del Pasado en él. Los incluí porque quería dar a las personas la idea de que practicamos sobre un pasado histórico muy rico. Por consiguiente escogí los maestros más prominentes del pasado, especialmente aquellos que habían sido fundadores de escuelas o tradiciones importantes. Pero estas figuras no representan nuestro linaje de la manera en que las figuras de un árbol de refugio Nyingmapa o Gelugpa representan su linaje.

No podemos verlos como nuestro linaje porque pertenecen a diferentes tradiciones y funcionan dentro de diferentes marcos con diferentes nociones sobre el Camino, y por consiguiente sobre el progreso en el camino. Por ejemplo, para Budhaghosha el Camino era el Camino a ser Arahant; después Tsonhkapa lo veía en términos del Camino Mahayana hacia la Iluminación Plena, que significaba atravesar los diez bhumis del Bodhisattva a través de una sucesión de vidas, abarcando tres asankhyeyas de kalpas; y después los maestros que le siguieron en el Vajrayana tenían una concepción diferente del Camino Mahayana hacia la Iluminación Plena, porque creían que podía ser acercada a siete o incluso menos vidas, a través de prácticas esotéricas.

¿Cómo puede uno determinar la manera en que estos maestros del pasado se relacionan entre sí si no existe un marco común de referencia? ¿Cómo puede uno juzgar sus logros espirituales relativos si no tienen una concepción común del camino? Sería bastante ingenuo, bajo estas circunstancias, considerarlos a todos ellos igualmente iluminados. He llegado a la conclusión de que no podemos determinar esto satisfactoriamente, y no hay necesidad de intentarlo. Considero que los Maestros del Pasado son lo que denominaría “Genios religiosos budistas” que han hecho una contribución a la vida budista de su época de diferentes maneras, pero no necesariamente de una manera que yo aceptaría en todos sus aspectos.

Justo porque una figura aparece en el Árbol del Refugio no quiere decir que lo que enseñó puede ser enseñado en un centro de la AOBO. Tal vez sí, si es que hay algo útil y compatible con nuestra presentación particular del Dharma, pero no necesariamente. En el caso de Dogen, por ejemplo, debemos reconocer que mucho del budismo del lejano oriente, especialmente el Zen japonés, parece haber sido influenciado en gran medida por algo con carácter de Vedanta, que por consiguiente nos lleva a dudar de que las enseñanzas de Dogen sean completamente ortodoxas, sino que algunas de ellas se apartan de las enseñanzas fundamentales del Buda sobre pratitya samutpada y anatman.

Algunas de estas figuras se encuentran en nuestro árbol porque representan nuestros antecedentes históricos –aún si en ciertos aspectos es una historia con errores. No vamos a refugio a ellos. Nuestros refugios son el Buda, el Dharma y la Sangha: Shakyamuni es el Buda, los libros de escrituras representan el Dharma, y los Bodhisattvas y Arahants representan la Sangha. Cuando nos postramos y decimos “Al mejor de los Refugios yo voy”, estamos yendo a Refugio al Buda, Dharma y Sangha Al mismo tiempo, estamos ofreciendo nuestro respeto a los Maestros del Pasado, quienes contribuyeron de una manera u otra a la historia del Budismo. A veces, doctrinalmente, a veces organizativamente, a veces bien, a veces quizá erróneamente. Al inclinarnos ante ellos somos conscientes de ese antecedente histórico. Es nuestro lugar de origen religioso, por así decirlo, incluso si en ciertos aspectos sus enseñanzas puedan tener errores o ser incluso cuestionablemente budistas. Por supuesto uno puede encontrar útiles algunas de sus enseñanzas, aunque uno necesitaría verlas con cuidado y críticamente para ver cómo pueden encajar con las enseñanzas que seguimos en la Orden.

Uno ciertamente puede respetar a los maestros del pasado, y uno podría tener fuertes sentimientos hacia ellos. Podemos permitirnos ser inspirados por sus vidas, en ciertos aspectos. Por ejemplo, cuando Atisha fue invitado a Tibet, se nos dice que consultó a la Bodhisattva Tara, y ella le dijo “si vas a Tibet, tu vida se acortará doce años”, pero aún así decidió ir. Este es un ejemplo admirable de la disposición de alguien a sacrificar parte de su vida por difundir el Dharma. Pero eso no significa necesariamente que sigamos alguna de las enseñanzas particulares de Atisha, aunque es posible, por lo menos, que encontremos útiles algunos aspectos de sus enseñanzas. Es el mismo caso de Hsuan Tsang. Podemos admirar su valentía al ir desde China hasta la India en busca del Dharma, pero eso no significa necesariamente que seguimos su interpretación del Vijñanavada.

Así, podemos respetar sus logros en algunos contextos sin necesariamente estar de acuerdo con ellos con todo nuestro corazón; e incluso podemos diferir en algunos aspectos. En otras palabras, necesitamos tener una actitud más crítica. Sólo porque un maestro se encuentre en nuestro árbol no quiere decir necesariamente que sus enseñanzas pueden ser enseñadas en nuestros centros.

P. ¿Esto se aplica de igual manera a los maestros del presente?

S. Sí, aunque el caso es algo diferente en cuanto a que yo tenía una relación personal con ellos y tenía la libertad de discutir sus enseñanzas con ellos. En cuanto a cuál era la estatura espiritual de mis maestros, siempre he dicho que no tengo una opinión al respecto. Los consideré más experimentados espiritualmente, más avanzados que yo, y eso era suficiente para mí No traté de ubicarlos en algún punto de una escala en particular. Para ilustrar lo que quiero decir cuento esa anécdota de tres de mis maestros, uno de los cuales respondió a una pregunta de esta manera: “Uno de nosotros es más avanzado que los otros dos, ¡pero ustedes nunca sabrán quién es!”

P. ¿Pero no estás esperando algo distinto de nosotros en relación contigo? Hasta qué punto tenemos la libertad de estar en desacuerdo con lo que enseñas?

S. Esto depende de si quieres decir libertad como discípulo o como ser humano. Como ser humano tienes toda la libertad de estar en desacuerdo, pero si estás en desacuerdo más allá de cierto punto como discípulo, dejas de ser discípulo. Por supuesto no espero que las personas sigan ciegamente y sin una actitud crítica todo lo que he dicho y enseñado, pero espero que me tomen en serio y que piensen cuidadosamente sobre ello, tal como lo hace la mayoría de los miembros de la Orden. Si los miembros de la Orden encuentran que están en desacuerdo conmigo en cuestiones importantes, espero que lo hablen conmigo, mientras aún estoy disponible, o con sus propios maestros dentro de la Orden. De otra manera, ser un discípulo no va a significar mucho.

P. Algunas personas sostienen que deberíamos “ir más allá de Bhante”. Ellos dicen que nos hemos beneficiado de tus enseñanzas y guía en el pasado, pero que ahora debemos tener una perspectiva crítica sobre tus enseñanzas. Quieren separar las enseñanzas con las cuales están de acuerdo de las enseñanzas con las cuales no están de acuerdo. O ven a tus enseñanzas más antiguas en relación con las posteriores y encuentran lo que consideran inconsistencias. Sugieren que es necesario tener una aproximación crítica.

S. Un discípulo debe de ser crítico, pero mucho de lo que se hace pasar por crítica estos días no es crítica de la manera en que yo lo entiendo. La verdadera crítica en relación con un maestro debe  ser parte de un esfuerzo de comprender, más que simple aceptar con fe ciega. En este sentido, una verdadera comprensión siempre es crítica. Pero la crítica debe  ocurrir en el contexto de una suposición de que el maestro ha dicho algo con significado espiritual. Si no puedes captar el  sentido de lo que tu maestro dice y no puedes estar de acuerdo con él, primero debes asumir que has malentendido o no lo has comprendido claramente aún, y entonces debes tratar de entender, a través de una discursión e investigación inteligente y crítica. Si no puedes hacer esa suposición probablemente ya has dejado de ser un discípulo.

P. Una de las distinciones críticas que algunas personas están haciendo en este momento está entre lo que dices del Dharma y lo que dices, por ejemplo, sobre los hombres y las mujeres sobre cuestiones sociales, tales como sexos separados, estilo de vida y demás. Así que se podría decir que Sangharakshita es mi maestro cuando habla del Noble Camino Óctuple, pero no cuando enfatiza la renuncia a la vida de familia, o cosas así.

S. Pues, el Buda también enfatizaba la renuncia a la vida de familia, así que les puedo referir a las enseñanzas y el ejemplo del mismo Buda, así como yo mismo tengo mis propios puntos de vista sobre lo que constituye el mejor estilo de vida para practicar y enseñar el Dharma. No obstante también he dicho que el compromiso es primario y el estilo de vida secundario. Así que aunque sí enfatizo la importancia de las comunidades de un mismo sexo, ciertamente no digo que alguien que no viva en una comunidad de un solo sexo no puede progresar espiritualmente de manera substancial. Ni digo que un discípulo que decide no vivir en una comunidad de un solo sexo es necesariamente un discípulo infiel, dependería de las motivaciones y la actitud del discípulo.

P. Tomemos quizá el tema más contencioso que ha habido, que es el de los hombres y las mujeres y sus respectivas aptitudes o lo que sea. Hay personas que han llegado a la conclusión definitiva de que no están de acuerdo contigo. Así que ¿cómo afecta esto al ser Discípulos tuyos, según tu perspectiva?

S. Considero que esto es una diferencia de opinión que no afecta su carácter de discípulos. Aunque mi perspectiva en este asunto proviene de mi experiencia personal y se relaciona con la tradición budista a través de las eras, no es demostrable científicamente, hasta donde yo sé.

Además, aún suponiendo que las mujeres tuvieran menos aptitudes espirituales que los hombres, cuando menos durante las primeras etapas de su vida espiritual, el peso de la opinión popular prevalente es tan fuerte contra esta perspectiva que sería sabio no insistir en ella, ya que no es crítica para la práctica del Dharma de una persona, y uno no desea desanimar a nadie sin buenas razones. Así pues, si alguien creyera que los hombres y las mujeres tienen aptitudes perfectamente iguales, no sería incompatible con ser discípulo mío.

Vale la pena decir también que un miembro de la Orden no está obligado a creer que los hombres y las mujeres son exactamente iguales en sus aptitudes espirituales.

P. Supón que alguien dijera que están completamente en contra de la “idea de sexos separados”.

S. Eso sería una cuestión mucho más seria. Estar en contra de todas las actividades de un solo sexo es algo demasiado doctrinal. Justo esta mañana escuché un programa de radio sobre la historia del feminismo y, entre otras cosas, los presentadores celebraban el hecho de que la mujer pudiera tener sus propios espacios. Decían que hay ciertas cosas que las mujeres no pueden hablar si hay hombres presentes. Parece ser generalmente reconocido que a veces las mujeres necesitan su propio espacio, al igual que los hombres. Si alguien propagara activamente el rechazo de las actividades de un solo sexo y, por ejemplo, desanimara a las personas a participar en retiros de un solo sexo, esto ciertamente pondría en duda su membresía en la Orden.

La diferencia entre el caso de las aptitudes relativas de los hombres y las mujeres, y el caso de las actividades de un solo sexo es que la primera de ellas es mi observación, que no puedo probar y que tiene pocas implicaciones en la práctica del Dharma en sí, mientras que la segunda es algo que recomiendo específicamente a mis Discípulos para su beneficio espiritual. Les recomiendo firmemente a todos que se aseguren de que en sus vidas haya un elemento importante de actividad de un solo sexo, especialmente comunidades, retiros, capítulos, etcétera. Y si alguien dice que esto no es necesario, no me está tomando en serio como maestro, y eso pondría en duda su membresía en la Orden.

P. Aunque no es una parte distintiva de tus enseñanzas, déjame preguntar esto. Algunos miembros de la Orden han estado preguntando si es aceptable que crean o no en el renacimiento. Hasta qué punto la no creencia [en el renacimiento] es compatible con ser miembro de la Orden.

S. Mis enseñanzas están basadas firmemente en las enseñanzas básicas del Buda, especialmente las que se encuentran en el Canon Pali, y el “renacimiento” por llamarlo así, se encuentra ahí. El renacimiento es por consiguiente parte de las enseñanzas esenciales sobre las cuales se basa la Orden, así que no puedes ser miembro de la Orden y decir que no existe tal cosa. No puedes, como miembro de la Orden, sostener una visión que contradice a la tradición budista Universal, y que al parecer era la perspectiva del Buda. No estás obligado a creer que existe el renacimiento, pero no puedes sostener categóricamente que no existe tal cosa.

P. ¿Puedes pensar en algunas otras perspectivas tuyas que pudiésemos aclarar si son necesarias o no para ser miembro de la Orden?

S. He dicho que no creo que la Orden o el movimiento deban ser reproducciones de Sangharakshita; por lo cual quiero decir que mis propias particularidades de carácter o intereses no deben determinar los intereses de otras personas. Por ejemplo, en mi propio caso, no he tenido ningún interés por las ciencias en particular, pero ciertamente no estoy diciendo que no es un área de interés válido para los miembros de la Orden y otras personas en el movimiento. De hecho, he tratado de animar a un mayor interés en las ciencias, pero con escaso éxito. Consideraría que esa es una limitación personal importante que no debe  ser seguida.

P. ¿Supón que hubiese alguien, en esta misma área, que no estuviese de acuerdo con tus enseñanzas de la Evolución Superior?

S. Dependería de qué es exactamente con lo que no concuerdan. Si están en desacuerdo con la totalidad de la ciencia moderna y están sosteniendo un creacionismo o algo así, eso es una cosa, porque estarían entrando en conflicto con los principios básicos del Dharma. No obstante, si están en desacuerdo sobre la manera en que he alineado la evolución con el Dharma, esa es otra cuestión. Yo no diría que un miembro de la Orden está obligado a encontrar que lo que he dicho sobre la evolución superior del hombre es una presentación aceptable del Dharma: se presumiría que sí aceptan lo demás que he dicho sobre el camino espiritual y lo están practicando. Pero sé que hay ciertas personas que desde el principio del movimiento encontraron dificultades con el lenguaje de la evolución superior, y lo han abandonado, y esto no ha afectado su carácter de discípulos míos.

P. Algunas personas recientemente han estado comparando lo que dijiste al principio de la historia del movimiento con lo que has estado diciendo recientemente. Alegan que hay diferencias definitivas y substanciales.

S. Parece que algunos han estado citando a Sangharakshita contra Sangharakshita! Es inevitable que mi perspectiva sobre diferentes temas se haya modificado un poco en el curso de casi sesenta años de enseñar, si incluimos mis escritos más tempranos como el Panorama. Las personas tienen que ver el desarrollo de mi pensamiento, en cuanto a que se ha desarrollado, como una totalidad sobre el período de una vida entera de enseñanzas. Y no es solamente cuestión de ser conscientes del desarrollo de ese pensamiento, pero reconocer que me he dirigido a diferentes situaciones y contextos y diferentes públicos en términos diferentes. Uno no puede simplemente confrontar una cita con otra.

P. Se ha dicho que ahora estás enfatizando tu “propia presentación particular del Dharma”, mientras que en tu charla “Es necesario realmente un Gurú” que diste en aquellos días tempranos del movimiento, decías que el Buda no tenía puntos de vista, ninguna filosofía, ningún sistema de pensamiento…

S. Confrontar lo que dije en aquella charla contra lo que he estado diciendo más recientemente es como confrontar lo que dijo el Buda en el Attavaga del Sutta Nipata contra, por ejemplo, sus enseñanzas en los suttas del Majjhima Nikaya. El Buda mismo dijo cosas diferentes a diferentes personas en diferentes ocasiones, de acuerdo con las necesidades de aquellas personas y las necesidades de la situación, sin duda de acuerdo con su propia inspiración.

Es verdad que el Buda no tenía puntos de vista –en el sentido de algo a lo que se apegara de manera egoísta. A veces he señalado que en los textos budistas puedo ver una distinción entre los puntos de vista erróneos, los puntos de vista correctos, y el no tener puntos de vista. Pero no puedes llegar a un no-punto de vista sin pararte en un punto de vista correcto. O para decirlo en términos del pensamiento de Nagarjuna, paramartha satya no niega samvriti satya. En efecto, al pararte sobre samvriti satya, realizas paramartha satya.

El gurú responde a las personas espontáneamente, no obstante, detrás de las diferentes respuestas hay algo que las unifica. No se dan al azar sin relación alguna. Y establece instituciones dentro de las cuales puede tomar lugar y comprenderse apropiadamente esa conexión espontánea. Esta es la manera de resolver la contradicción aparente entre lo que dije en aquella charla y algunas de las cosas que he estado diciendo más recientemente sobre la importancia en la Orden de mi presentación particular del Dharma.

En este caso, no hay inconsistencia de substancia. Es una cuestión de realmente comprender lo que significan las dos posiciones, pero, para tomar el tema general de la consistencia, déjame ser un poco provocativo y citar a dos autores: Blake dice “Un hombre que nunca cambia de opinión es como agua estancada que engendra los reptiles de la mente”; luego Emerson declara que “Una consistencia tonta es el Hobgoblin” (duende latoso) de las mentes pequeñas”. No sostengo que he sido completamente consistente. Creo que no es razonable que alguien espere que a través de un período de sesenta años sea completamente consistente con todo lo que he dicho o escrito.

P. Realmente la cuestión no tiene tanto que ver con cosas específicas que has dicho en ocasiones particulares, sino que se dice que en aquellos días eras muy radical y ahora eres mucho más conservador. Para empezar, se argumenta, tu actitud era enteramente abierta: por ejemplo, alrededor de 1972 dijiste que “lo único que no se puede cambiar es Ir a Refugio a las Tres Joyas” mientras que ahora tu énfasis es en conservar el cuerpo particular de enseñanzas, prácticas e instituciones.

S. ¿Pero qué quise decir cuando dije “Lo único que no se puede cambiar es Ir a Refugio”? La intención no era decir que “todo se puede cambiar, no importa”, sino subrayar la extrema importancia de Ir a Refugio. Este es un ejemplo de un recurso retórico bien conocido, especialmente en la tradición india: exaltas o resaltas algo de una manera exagerada para enfatizar su extremada importancia, pero lo que se dice no se debe tomar literalmente. A veces hablo provocativamente para poner a las personas a pensar, como cuando he dicho: “un miembro de la Orden sin capítulo es solamente medio Miembro de la Orden”. Claramente sería absurdo tomar esto literalmente.

Recuerdo la ocasión en que respondí que “lo único que no se puede cambiar es el Ir a Refugio”. Fue mientras estaba en retiro en Cornwall, y me preguntaron “Qué se puede cambiar, Bhante?” Inmediatamente pensé “!Caray, apenas llevamos seis años y ya están pensando en cambiar cosas!”

No es cuestión de confrontar una cita contra otra, ese es el tipo de polémica que se ve en la política, no es algo serio. Mi pensamiento debe  verse a través de los años y tomarse en su totalidad. Ciertamente ha habido cambios, por ejemplo, ahora veo el modelo Triyana Tibetano muy diferente a cómo lo veía hace algunos años. Ha habido cambios de énfasis. Así pues, debemos reconocer cuando menos algunos cambios en mi manera de pensar a través de los años, pero ciertamente hay una continuidad. Esto lo he ilustrado en un área en particular en La historia de mi ir a Refugio, y quizá podría ilustrarse en otras maneras también.

P. En Madhyamaloka ha habido alguna discursión sobre tu uso en los días tempranos, de una terminología y un lenguaje filosófico “con mayúsculas”, por ejemplo: “El Absoluto”, “Lo Incondicionado” etcétera. Parecería sugerir algo más o menos eternalista ¿Usarías esos términos ahora?

S. Estos son ejemplos de lo que llamo una terminología poética y lo que David Brazier, en Un nuevo budismo, llama retórica. Y es una terminología que es improbable que usara ahora, habiendo aprendido con la experiencia a ser más cuidadoso y darme cuenta de que las posibilidades de ser malentendidas son mayores de lo que había pensado. Al leer mi obra uno siempre debe de ver cuidadosamente el contexto y tratar de comprender lo que se está diciendo en ese contexto. En estos casos no creo que mi comprensión fundamental haya cambiado en absoluto. No quise decir nada eternalista cuando usé ese lenguaje, incluso si es fácil entenderlo de esa manera.

P. Digamos que un miembro de la Orden supiera que otros maestros budistas vienen a una localidad cercana, justo como tus maestros vinieron a Kalimpong, y decidieran “sentarse” a sus pies al mismo tiempo que a los tuyos. ¿Qué dirías de eso?.

S. Uno podría preguntar, ¿por qué? Si quieres practicar el Dharma, ya tienes suficiente para ponerte a trabajar. ¿Cuál es la naturaleza de tu interés en estos otros maestros? Quizá pienses que es posible aprender algo nuevo y diferente de ellos, pero lo más probable es que lo que aprendas sea una fuente de confusión para ti. Si uno ha establecido firmemente su práctica y tiene fe en sus maestros dentro de la Orden, entonces uno no necesita ir a otros maestros de esta manera. Y la mayoría de los miembros de la Orden no lo hace.

P. ¿No hay un argumento que, en algunos casos, algunas de nuestras enseñanzas centrales, pueden ser aumentadas por voces de otras fuentes, dentro de otras tradiciones y al mismo tiempo permanecer fieles a nuestro marco de enseñanzas?

S. Creo que es difícil hacerlo. Si vas con un maestro fuera del movimiento, usualmente recibes la enseñanza que buscas. Junto con ella viene la tradición a la cual pertenece, y eso informa lo que está diciendo sobre las enseñanzas que te interesan. Difícilmente puedes involucrarte con este maestro en alguna medida sin involucrarte en su tradición. Entonces te vas a encontrar inmerso en un paquete completo que difícilmente encaja con suavidad dentro del marco que tenemos en la Orden, y por lo tanto te sacará de la Orden. Es mucho más seguro acudir a los libros en busca de las enseñanzas particulares, porque puedes leerlos críticamente y tomar lo que necesitas. Puedes incluso discutirlos con otros miembros de la Orden.

P. ¿Qué no hay cosas que uno pudiera aprender de otros grupos budistas sin menoscabar nuestro sistema? Por ejemplo, tomando un ejemplo marginal, algunas personas en la Rigpa Sangha, han prestado mucha atención detallada al apoyo de las personas en etapas terminales de su vida. Aquí no parecería haber ningún conflicto de principio en que aprendamos de ellos.

S. Ha habido varios ejemplos recientes de miembros de la Orden que han ayudado a sus propios amigos o parientes a pasar por la experiencia de morir. Eso Parece ser una parte natural de la vida de la Orden. Así que no podría haber  objeción a que un grupo de personas dentro de nuestra Sangha, en base a su compromiso existente como miembros de la Orden y sin perjudicar a ésta, se dedicaran a este trabajo de la misma manera que lo ha hecho la Rigpa Sangha.

Si quisieran ver lo que pueden aprender de otras personas fuera de la Orden sobre este tema en particular, ya sea de la gente de Rigpa, o de cualquier otro, hay ciertas consideraciones que deberían tenerse en cuenta. Deben asegurarse de que su compromiso básico se encuentra en la Orden y de que comprenden sus principios. Deben  considerar cuidadosamente su propia motivación: ¿su interés en investigar lo que otros están haciendo es una señal de inquietud o insatisfacción, tal como lo hemos encontrado en algunos de estos casos, o un deseo de realzar nuestra vida y práctica colectivas al mismo tiempo que se respeta nuestro marco de comprensión? Ciertamente deberían hablar esto con sus preceptores y sus amigos espirituales, y estar abiertos a lo que éstos digan.

También deberían considerar si lo que desean investigar genuinamente vale la pena, especialmente considerando todo lo demás que tenemos que hacer. Quizá deba de hacerse una lista del tipo de investigaciones que se pueden considerar útiles. Las personas tienen todo tipo de ideas diferentes sobre lo que podría ser valioso traer a la Orden, y eso necesitaría evaluarse y considerar su prioridad.

Antes de emprender estas investigaciones, deben  determinarse pautas y procedimientos para realizarlas y para asimilar lo que emerja de ellas. He establecido algunos principios para esto en mi charla “Los cinco Pilares de la AOBO” en donde me refería al Pilar de la Experimentación. Hablé de que un pequeño grupo de miembros de la Orden con antigüedad (senior) realizara los experimentos, y que los resultados fueran comunicados posteriormente al resto de la Orden y el Movimiento. No quise decir que cualquiera podría hacer lo que quisiera y llamarlo un experimento. Para dar un ejemplo, parece que una meditación en particular que no practicamos podría ser útil, entonces dejemos que un pequeño grupo de miembros de la Orden experimentados y “senior” la prueben y vean qué resultados da. Los mecanismos exactos para esto deberán ser determinados por los Preceptores Públicos, sin duda en consulta con los Directores de los Centros y otras personas.

P. Bastantes miembros de la Orden han acudido a maestros budistas fuera de la Orden y consideran que se han beneficiado de ello, en distintos grados. Algunos dirían que han obtenido algo espiritualmente importante que no estaba disponible en la Orden. ¿Cómo afecta esto el ser Discípulos tuyos, y por consiguiente, miembros de la Orden?

S. Las personas que yo he Ordenado deberían, por cortesía, consultarme antes de ir con otro maestro, o deberían consultarlo con sus propios preceptores si yo no os Ordené. Esto es algo tradicional que hacer. En algunos cuantos casos las personas me han consultado, pero me sorprende que la mayoría no lo ha hecho. No sé si otros preceptores han sido consultados o no.

No obstante, aún cuando las personas me vienen a ver sobre algún maestro, o sobre adoptar alguna práctica o enseñanzas que yo no he enseñado, rara vez me lo preguntan con el espíritu de estar preparados a seguir lo que yo diga, sea un “sí” o un “no”. A menudo simplemente están buscando mi aprobación para hacer lo que más o menos ya decidieron hacer. No están preparados a aceptar un “no”, de mi parte. Solamente recuerdo a una persona que me consultó y que definitivamente aceptó mi respuesta negativa.

P. ¿Así que, puesto que hay bastantes miembros de la Orden en occidente que han ido con otros maestros, qué deberían hacer ahora, Bhante? Por lo que has dicho, muchos de ellos, en un sentido, se encuentran en una posición irregular. ¿Cómo regularizarla?

S. Sería bueno que lo rectificaran lo más pronto posible. Si aquellos que no lo consultaron, o lo consultaron sin realmente estar preparados a aceptar un “no” desean regularizar su posición, deberían venir y verme, o ver a sus propios preceptores para aclarar su posición. En primer lugar, deberían afirmar que, aunque han tomado enseñanzas en otros lados, su corazón definitivamente se encuentra conmigo y con la Orden y la AOBO.

En general la pregunta clave es: ¿hacia quién está la lealtad o la filiación? En principio es posible aprender cosas de maestros de tradiciones fuera de la AOBO y traerlas a su propia práctica y a la práctica de la Orden. Pero uno debe  tener cuidado de no dejarse absorber en lo que uno ha aprendido de tal manera que termine identificándose más y más con la tradición de la cual aquellas enseñanzas provienen, y alejándose de la Orden, como ha sucedido en dos o tres casos.

No obstante, las personas tienen que tener claro que no es simplemente cuestión de dónde se encuentra tu corazón, lo que sienten al respecto. Uno debe  resistir la tendencia a salirse con la suya de manera engañosa. Porque está la pregunta más amplia de cómo es que lo que aprendieron encaja en el patrón total de mis enseñanzas, y por ende de las enseñanzas de la Orden. Probablemente muchas personas no serían concientes de esto, y no podrían determinarlo. Necesitarían hacerlo en diálogo con sus preceptores y con otros miembros de la Orden experimentados que realmente comprenden estas cuestiones.

P. Uno de los temas más problemáticos asociado con otros maestros se relaciona con la cuestión del tathagatagarbha, la Naturaleza Búdica, etc. He hablado con varios miembros de la Orden que han dicho que aunque no le dan una importancia al tathagatagarbha como doctrina metafísica, encuentran que un enfoque que enfatiza la pureza natural de la mente, provenga del Dzog Chen, Mahamudra, o lo que sea, es espiritualmente liberador. Alguien me dijo que cuando le introdujeron a esta idea en un retiro que no era de la AOBO por primera vez experimentó una perspectiva positiva de la vida espiritual –que no habían tenido en su experiencia previa mientras recibían enseñanzas en el movimiento. Estos son occidentales que parecen estar hablando con completa y genuina sinceridad, y que sienten dolor porque comprenden que esto los pone en conflicto con lo que entienden que son tus puntos de vista, pero que por lo demás no hay nada con lo que estén en desacuerdo.

S. El criterio es, ¿dejaron de practicar? Si no dejaron de practicar, entonces en efecto están diciendo que tathagatagarbha es potencialidad, no algo que ya posees aquí y ahora. Al parecer hay dos tradiciones de tathagatagarbha. Una dice que tathagatagarbha representa potencialidad. La otra sostiene que tathagatagarbha es algo que realmente está presente dentro de uno aquí y ahora. Es la segunda de estas dos versiones de tathagatagarbha la que he criticado por ser eternalista, no la primera, que habla en términos de potencialidad.

Siempre y cuando tathagatagarbha se use como lenguaje de potencialidad, de manera poética o metafórica, o incluso retórica para indicar potencialidad y animar la fe y la confianza, no es realmente un problema. No obstante, hay una tendencia a que se vuelva algo metafísico. Si se vuelve algo metafísico entonces va a minar la práctica. De hecho, se vuelve un tipo de antinomianismo1, en donde incluso se puede sostener que los preceptos son innecesarios.

EL antinomianismo está presente, al parecer, en algunos aspectos del Budismo del lejano oriente. Recientemente he estado leyendo el libro de David Brazier, así como el de Pruning the Bodhi Tree, editado por Jamie Hubbard y Paul Swanson, que es sobre un movimiento japonés llamado Budismo Crítico”. Ambos libros dejan claro que hay mucho en el Zen que no es verdaderamente budista. En ciertos aspectos es bastante sorprendente. David Brazier escribe sobre Yasutani Roshi. Un maestro muy prominente del siglo XX, y es algo realmente para abrir los ojos; incluso de algunas maneras horrible. Yasutani Roshi, supuestamente un maestro Zen iluminado, supuestamente que recibió una transición plena que se remonta a Shakyamuni, activamente apoyó al imperialismo japonés y escribió libros anti semíticos. Algunas formas de Zen o Dzogchen o Mahamudra, al igual que algunas formas de Vedanta, al parecer sostienen que no hay diferencia entre lo hábil y lo torpe, porque ambos tienen la misma base en la naturaleza de buda, o algo así. Entonces no hay necesidad de esforzarse o de practicar, no hace falta la renuncia, etcétera.

Uno debe por consiguiente tener cuidado de no alejarse demasiado del pensamiento del Buda. Aún si se está hablando metafóricamente de la pureza última, uno aún debe  transformar la avidez, el odio y la ignorancia en la mente de uno, como el Buda repetidamente enseñaba. Y tendrás que hacer juicios éticos.

Si algunas personas dicen que el lenguaje de tathagatagarbha les ha ayudado, uno no puede negar su experiencia. La pregunta es, ¿qué quiere decir para ellos esta experiencia? ¿dónde la colocan en un contexto más amplio? No es posible comentar más al respecto sin saber quién les enseñó eso, o exactamente qué se dijo, cuál fue el énfasis en el caso en particular. Por supuesto, si a las personas les preocupa que pueden estar en conflicto con lo que he enseñado, pueden venir a verme.

P. ¿Qué pasa cuando las personas aprenden algo fuera de la Orden, sin hablarlo contigo, y sin pasar por un proceso de asimilación, y después lo practican y lo enseñan a otros, ya sea en un centro o no?. ¿Cuál es tu posición al respecto?

S: Para ser directos, me parece que están saliéndose de la Orden, asumiendo que lo que enseñan o incluso sólo practiquen, no es compatible con las enseñanzas que tenemos en la Orden, o no se ha ajustado de manera que sea compatible. Si enseñaran como algo central o importante algo que es incompatible con lo que yo veo como una enseñanza budista básica, eso los colocaría fuera de la Orden. A fin de cuentas hay ciertas comprensiones doctrinales y expresiones prácticas de aquellas comprensiones que son fundamentales para continuar siendo miembros de la Orden. Afortunadamente dudo que haya muchas personas en esta posición, si es que los hay.

P. ¿Sobre qué base debemos incorporar otras prácticas y por qué? Qué variedad necesitas, ¿cuántas diferentes prácticas son necesarias para tener una vida espiritual plena?

S. Siempre he enfatizado que lo mejor es profundizar en lo que uno ya tiene, en vez de tratar de acumular una diversidad de prácticas. Lo que ya tenemos es, hablando ampliamente, suficiente. Tenemos Atención Consciente de la Respiración y Mettabhavana, tenemos consciencia plena en general, los Cuatro Satti-patthanas, los Cuatro Brahmaviharas, las prácticas preliminares, las prácticas de los Seis elementos, etcétera. Hay mucho allí con qué practicar. Creo que algunas personas quieren algo nuevo sin estar plenamente familiarizados con lo que ya hay disponible. No obstante, uno debe de admitir, que a veces estas prácticas quizás no se presentan de una manera suficientemente imaginativa o inspiradora.

No obstante, en principio, quizá no haya ninguna práctica de la tradición budista que no pueda acomodarse a nuestro sistema. Pero cualquiera que sea la práctica que uno haga, necesita ser adaptada y practicada dentro del marco general. En algunos casos puede requerirse pensarlo cuidadosamente e incluso recortarle algunos elementos de sus contextos originales, de manera que pueda colocarse en nuestro sistema. Por ejemplo, muchas prácticas que provienen de las tradiciones tibetanas vienen muy impregnadas de suposiciones sobre el Triyana, que uno tiene que trabajar.

Está la pregunta de dónde encajan las prácticas “sin forma”. Aunque nunca he estado muy seguro qué quiere decir eso, siempre me ha parecido algo vago. Hasta donde he entendido de o que la gente habla al respecto, siempre me han parecido una extensión de Solo Sentarse, que enseñé desde el inicio. Algunas personas le han puesto más énfasis a eso, y lo han encontrado útil. No obstante, uno debe de tener cuidado de practicar en el contexto de la totalidad del Sistema de Meditación: uno no debe de practicar Solo Sentarse solamente. Debe de alternarse con períodos de hacer un esfuerzo a través de una u otra prácticas, tal como lo he descrito en mi charla sobre el Sistema de Meditación. Dudo mucho que Solo Sentarse o “Conciencia Pura”, como se le llama, te lleve hasta el final por sí sola, y parece que deja mucho espacio para engañarse.

Luego están las cuestiones más amplias sobre cómo asegurarse de que haya un alto grado de comunidad en las prácticas en que están involucrados los miembros de la Orden. Si todos están haciendo diferentes prácticas se vuelve más y más difícil tener un sentido de que somos una sola Orden, y algunas personas van a comenzar a sentir más y más filiación con el grupo de donde provenga esa forma particular de práctica. Además, mientras más variedad de prácticas haya, más difícil será que la gente encuentre guía en su práctica de parte de practicantes más experimentados de la Orden. Somos una comunidad espiritual unida, y por lo tanto necesitamos un cuerpo común de práctica, un vocabulario común de práctica, sin tener una variedad innecesaria o caprichosa.

P. Ya sé que no todo se puede definir exactamente, pero al mismo tiempo esto me parece demasiado amplio. No tengo claro aún cuáles son los criterios que deberíamos usar. Sobre qué base deberíamos juzgar si la gente puede o no aprender y luego enseñar algo nuevo, especialmente de maestros de fuera de la Orden?

S. Al hablar de esto con quien sea, debemos comenzar con alguna investigación sobre motivos. ¿Realmente se han involucrado con las prácticas y las enseñanzas ya disponibles? A menudo la gente quiere aprender algo nuevo porque no se han llevado bien con lo que ya tienen. Y a menudo eso hay que examinarlo. Puede haber algún factor personal involucrado que necesite aclararse.

De manera similar, si quieren enseñar algo nuevo, necesitamos preguntarnos ¿por qué tienen tantas ganas de enseñarlo? ¿Simplemente quieren ser maestros, reunir un pequeño círculo alrededor de ellos, o algo por el estilo?

En segundo lugar, necesitamos examinar su relación con maestros, kalyanamitras y preceptores de la Orden, si los tienen. Quizá estén buscando o incluso necesiten cierta guía en su vida espiritual y su práctica y eso les está atrayendo hacia aprender de otros maestros. Puede que haya malos entendidos o confusiones sobre la manera en que hacemos las prácticas actuales, quizá porque no se les han enseñado muy bien. Entonces necesitamos investigar por qué no han encontrado guía dentro de la Orden y ver si podemos ayudarles a que la encuentren Así, necesitamos asegurarnosde quee la motivación sea saludable y que en general todo vaya bien con la vida espiritual de la persona y su pertenencia a la Orden, y que tengan la guía que necesiten.

Después, si todo esto se ha aclarado y creemos que hay algún beneficio espiritual real que pudiera obtenerse de una enseñanza en particular que pudiera aprenderse y enseñarse, necesita traerse a la atención de los Preceptores Públicos y ellos deben  arreglar la manera de examinarla con mayor detenimiento.

Los Preceptores Públicos necesitan hablar de estas cuestiones con cuidado, si es necesario conmigo, y llegar a alguna manera de discernir lo que es valioso de lo que no. Necesitan evolucionar procedimientos claros y efectivos. Otros miembros de la Orden necesitan cooperar con ellos para este fin, y no solamente reaccionar contra la autoridad o lo que sea, la mayoría de nosotros estamos demasiado viejos para eso! Aquí también, estoy seguro que la mayoría de miembros de la Orden no tendría dificultad en cooperar con los Preceptores Públicos y felizmente les apoyarían en la tarea de llevar a cabo sus diversas responsabilidades.

P. ¿Por qué es que los Preceptores Públicos son los indicados para establecer un sistema para integrar las innovaciones en la práctica espiritual?

Los Preceptores Públicos son los miembros de la Orden de mayor antigüedad y experiencia y son Preceptores de las personas que yo no he Ordenado. Por consiguiente son los más competentes en esta área en particular. Ellos no tienen que hacerlo necesariamente todo por sí solos: bien podrían nombrar a otros que consideran los mejor calificados para un propósito particular. Y podrían necesitar consultarlo con otros miembros de la Orden que llevan responsabilidades importantes, tales como los Directores o Directoras.

P. Hay algunos que cuestionan la posición de los Preceptores Públicos en el Movimiento. Cuestionan que sea esta la mejor manera de que la Orden decida quién se Ordena o que decidan quién decida quién se Ordena.

S. Bien, ¿cuáles son las alternativas? No puedes escoger a las personas simplemente por su antigüedad en la Orden, porque eso no necesariamente te daría a las personas indicadas para tal responsabilidad. Los Preceptores Públicos no salen de la nada: han surgido de las filas de la Orden existente, usualmente después de ser Preceptores Privados en primera instancia, y previamente habiendo sido kalyanamitras y habiendo enseñado en centros y conducido retiros, etcétera. Las personas suben a través del sistema en la medida que otras personas, especialmente aquellas que llevan responsabilidades, les consideran estar calificados para llevar tal responsabilidad. Si algunos miembros de la Orden con antigüedad no han subido a través del sistema, presumiblemente hay una buena explicación para ellos: quizá no desean funcionar de esa manera, o no tienen el perfil para ello, o no están listos, por alguna razón u otra.

La otra alternativa sería un sistema democrático, pero no puedes elegir a las personas a este tipo de responsabilidad espiritual a través de un voto. Solamente en base a que alguien obtenga la mayoría de votos no significa que sea alguien espiritualmente calificado o calificada. La mayoría de los miembros de la Orden aún no tienen experiencia para juzgar quién está listo para tomar la responsabilidad de ser Preceptor. Por supuesto, los comentarios de cualquier miembro de la Orden que conozca a la persona en cuestión deberían ser considerados cuidadosamente por aquellos que tengan que tomar la decisión, y es por ello que los Preceptores Públicos han establecido un proceso de consulta para los nuevos Preceptores.

También habría dificultades prácticas en una elección por voto. Por ejemplo, todos los miembros de la Orden tendrían que poder conocer a los candidatos. Y toda la Orden tendría que estar involucrada, incluyendo por supuesto a la parte de la India, lo cual presentaría todo tipo de problemas. Si regionalizaras este proceso se volvería muy difícil mantener una unidad geográfica de la Orden y el movimiento. Cuando llegara el momento de elegir nuevos Preceptores, los candidatos tendrían que presentarse, y tendrían que tener sus propios mecanismos de publicidad, etcétera. Tarde o temprano surgirían las campañas electorales por el voto, facciones y partidos, etcétera. Tengo en mente la historia de la Sociedad Teosófica, como una advertencia de qué tan terrible se puede volver esto: en sus días tempranos era una organización más pequeña de lo que es ahora, y había campañas vigorosas para la elección a la presidencia, y todo tipo de acusaciones y contra acusaciones contra los diversos candidatos. En resumidas cuentas, ¿cómo podrían ser elegidos los Preceptores Públicos por la totalidad de la Orden a través de un voto? Creo que sería un error tanto en teoría como en la práctica. No digo que el sistema actual es infalible, pero no se me ocurre ningun otro.

P. Y qué piensas de la posición del Colegio en la arquitectura general de la Orden y el Movimiento.

S. Los preceptores Públicos, debido a sus responsabilidades espirituales, claramente tienen la posición clave en esa arquitectura, pero hay varios grupos de miembros de la Orden con antigüedad que tienen responsabilidades que se traslapan y que entre ellas cubren la totalidad de la Orden y el movimiento: los Preceptores Públicos, los Preceptores Privados, los Directores y Directoras, los Presidentes (creo que es necesario reinstituir el cargo de Presidente), los Convocadores de la Orden, los Convocadores de Mitras, los Convocadores de Capítulos. Es necesario que haya un enlace entre todos ellos de manera que no anden cada uno por su cuenta, o que entren en algún tipo de conflicto. Sé que se ha iniciado un proceso de enlace y espero que de como resultado objetivos colectivos mucho más claros para aquellos cuerpos colegiados en particular y quizá para la estructura en su totalidad. Definitivamente necesitamos una estructura así, si hemos de ser efectivos, y necesitamos algún tipo de oficina central en donde se enfoque esta estructura.

Hablando de objetivos, necesitamos tener cuidado con lo que queremos decir y en qué contexto estamos hablando. Está bien formular objetivos, como lo he sugerido, para diseminar el Dharma, por ejemplo: en dónde y cómo hacerlo. Pero a veces me preguntan cómo veo la dirección que la Orden tome en el futuro. Encuentro que es una pregunta rara. Es casi como si estuviéramos en un partido político El objetivo de un partido político es obtener y mantener el poder y todo se moviliza para ese fin Nosotros no tenemos un fin en ese sentido. Por consiguiente creo que es completamente una pseudo-pregunta: todo lo que puedo decir en respuesta a ello es: “Veo a todos los miembros de la Orden tratando de profundizar su práctica del Dharma y extender el Movimiento”. Si uno quisiera ser grandilocuente podría decir “Nuestro objetivo es la Iluminación y en esa dirección nos movemos”.

P. En lo que has dicho hasta ahora, Bhante, hay un fuerte énfasis en lo que podría llamarse conservación: asegurarse de que la Orden se mantenga fiel a sus principios fundacionales, contenidos en las enseñanzas, prácticas e instituciones que has establecido. En tu entrevista con Mahamati, presentada en la Convención de la Orden en Bodhgaya, mencionaste, por así decirlo, un factor de equilibrio entre conservación y desarrollo- responder creativamente a las nuevas circunstancias y necesidades. ¿Por qué aquí estás enfatizando conservación y no desarrollo?

S. El estado de ánimo de los tiempos favorece una constante innovación y eso tiene una influencia en nosotros. Y ese estado de ánimo debe  resistirse. Hay, no obstante, espacio para desarrollo, dependiendo lo que signifique desarrollo. Si significa considerar una nueva manera de comunicar el Dharma, esto ha de animarse: el desarrollo de Buddhafield, es un ejemplo de ello. Podría ser útil que surgieran otros desarrollos en términos del medio usado y la manera de presentación. Pero no debe  haber ningún desarrollo que sea inconsistente con las enseñanzas, prácticas e instituciones que ya tenemos, y no debería haber ninguna innovación en términos de principios

Aunque ciertamente veo un lugar importante para el desarrollo en este sentido, siento la necesidad de enfatizar el apegarnos a nuestros principios básicos y basarnos firmemente en mi presentación particular del Dharma. Esto es porque detecto, dentro de la Orden y movimiento actuales, que las voces más fuertes parecen estar a favor de lo que podría llamarse innovación. No escucho igualmente fuertes ni numerosas voces que se alcen a favor de conservación, por llamarlo así. Por consiguiente veo que la innovación es un peligro actual, especialmente en vista del clima general alrededor de nosotros, y la locura por lo que es nuevo y diferente, por el simple hecho de ser nuevo.

P. Supongo que unas cuantas personas podrían estar pensando en hacer las cosas de manera diferente porque no tienen confianza ya sea en los resultados que han obtenido de su propia práctica o en su comprensión de lo que es la Orden, o en tus enseñanzas. ¿Qué les dirías?

S. Es difícil generalizar: depende de quién dice eso. En muchos casos uno podría simplemente decir: “sólo necesitas practicar con más ganas”, o “necesitas practicar en condiciones que te apoyen mejor”, porque a menudo las personas se ponen en situaciones que no apoyan su práctica del Dharma y después se sorprenden de no estar progresando, y le echan la culpa al movimiento o a las prácticas que están haciendo. Pero, si están convencidos, después de hablarlo conmigo y con sus otros maestros en la Orden, de que no están encontrando en la AOBO y sus principios y prácticas nada que sea de utilidad para su vida espiritual, entonces más les convendría dejar la Orden y buscar en otro lado.

S. Alguien ha estado sosteniendo recientemente que nuestra Orden no es aún una Orden Budista real, porque no tenemos las enseñanzas y la guía para alcanzar Visión Profunda (insight), y que tendremos que vérnoslas con esto una vez que Bhante se haya ido. ¿Es posible tener Visión Profunda dentro de la Orden y Movimiento? ¿Tenemos lo que hace falta para lograrlo o tenemos que buscar algo nuevo?

S. Uno no necesita mucho para tener Visión Profunda, en el sentido de Entrada a la Corriente. En el Mahaparinibbana zutanita en el Digha Nikaya, el Buda ofrece un “Espejo del Dharma” a través del cual puedes saber si alguien ha Entrado a la Corriente: uno mira y ve si tienen una fe inquebrantable en las Tres Joyas y una moralidad Perfecta. ¡Fe inquebrantable y perfección en moralidad!. ¡Esto es algo de una magnitud bastante alta! Por consiguiente sabemos qué criterios son, y debemos poder aplicarlos por lo menos a nosotros mismos.

No obstante, creo que unas cuantas personas están sobre preocupados con Entrar a la Corriente y la Visión Profunda. En algunos casos la preocupación se vuelve casi neurótica: parecería indicar una falta de fe en el Dharma y ciertamente una falta de fe en lo que estamos practicando. Uno debería preocuparse con practicar el Dharma en la mejor manera de acuerdo con su capacidad, entonces la Entrada a la Corriente surgirá por sí sola. Y el miembro de la Orden promedio tiene más que suficientes recursos, en términos de enseñanzas, prácticas e instituciones que le apoyan para tener Visión Profunda.

P. ¿Pero no necesitas una guía detallada de un maestro para lograr Visión Profunda?

S. ¡En realidad todo lo que necesitas son unas cuantas líneas del Dhammapada!

P. ¿Pero no necesitas un código detallado de exactamente qué hacer en tu meditación y no necesitas la atención personal detallada de un maestro, tal como aparentemente se hace en la tradición Zen y ese tipo de cosas?

S. Algunos maestros podrían realmente ofrecer eso, pero no lo necesitas realmente. Uno debe de tener cuidado de lo que he denominado los “tecnicismos pseudo espirituales”. ¿En cuanto a la tradición Zen, bien, qué es lo que uno realmente obtiene? Ves al Roshi de vez en cuando, le presentas tus respuestas al Koan, y te dice, ”¡No, así no es. Vete de aquí!”

A las personas a menudo les falta confianza en sí mismos. Quieren que les digas: “Vas bien, ya has entendido, no estás equivocado”. Quieren saber exactamente qué hacer. Algunas personas quieren mentores, que es distinto a un Kalyana Mitrata en el sentido usual, que por supuesto todos los necesitan. Por consiguiente debemos tener esto en cuenta y darles ánimo y confianza.

Por supuesto, para poder progresar espiritualmente necesitas conocer cosas básicas, como de qué manera trabajar con los obstáculos y la importancia de equilibrio balanceado. Pero eso lo puedes obtener fácilmente dentro de la AOBO. He escrito sobre estas cuestiones en cierta extensión en muchos lugares, y las personas deben  referirse a ello, quizá más de lo que algunos lo hacen. Si estudias las enseñanzas que te he dado, si las aplicas sistemáticamente y de manera regular durante un período de tiempo, no te preocupes, los resultados vendrán. Y vienen: he visto a personas crecer y cambiar en períodos comparativamente cortos. Esto ha sido obvio desde el principio del movimiento.

P. ¿Nuestra Orden es una Orden Budista real?

S. Algunas personas tienen ideas sobre lo que son las tradiciones auténticas, etcétera. Por lo menos podría decir  que somos una Orden budista más real que muchas otras que podría mencionar. Por supuesto somos una Orden joven, pero quizá ya tengamos algunos entrantes a la corriente por aquí o por allá que no hacen ruido al respecto.

Pero las personas quieren que se les de confianza, ese es el problema, y a menudo esto se debe a una falta de confianza en sí mismos y en lo que están haciendo, y en el Dharma que están practicando.

P. Algunas personas se preguntan si acaso no has cambiado tu perspectiva sobre el valor y la importancia de vivir en comunidades de un sólo sexo, y trabajar en Negocios Éticamente Correctos basados en Equipos.

S. No, definitivamente no he cambiado en eso, y siento la necesidad de enfatizarlos más que nunca. Los Negocios Éticos basados en Equipos son un desarrollo del principio general de “Subsistencia Correcta”, que se encuentra en el Noble Camino Óctuple del Buda, y continúo viéndolo como algo esencial. No es suficiente que practiquemos tener un trabajo éticamente correcto lo mejor que podamos en el mundo, allá afuera. La situación ideal de trabajo es un trabajo éticamente correcto basado en equipo, en donde se genere dana y la amistad espiritual se pueda desarrollar más intensamente.

También creo en las comunidades de un solo sexo y en otras actividades de un solo sexo. El hecho de que sean menos populares con algunas personas de lo que eran antes, no quiere decir que yo haya cambiado mi manera de pensar al respecto. En otras palabras, no fueron simplemente una adaptación a las circunstancias de los años sesentas y setentas. Tienen un valor permanente.

P. Algunas personas sugieren que el espíritu de la época es diferente ahora y que las personas tienen menos inclinación a trabajar en Negocios Éticamente Correctos Basados en Equipo o vivir en comunidades de un solo sexo, así que deberíamos cambiar nuestro enfoque.

S. La pregunta es, ¿cómo cambiarías el enfoque con respecto a el trabajo éticamente correcto?. Y de cualquier manera, aún si las personas no quieren trabajar en negocios éticamente correctos basados en equipo, o vivir en comunidades de un solo sexo, eso es irrelevante. Después de todo, la mayoría de las personas ni siquiera quieren practicar el Dharma. Uno anda proclamando lo que le parece que es bueno y correcto, independientemente de los cambios en la moda.

Por supuesto, el Dharma aún tiene algo que decirle a aquellos que no pueden o escogen no vivir y trabajar de estas maneras. Si no puedes trabajar en un negocio éticamente correcto basado en equipo, tendrás que ganarte la vida de alguna manera, y los principios de Subsistencia correcta aún se aplicarán a ti. De igual manera, recomiendo firmemente las comunidades de un solo sexo, pero si las personas no quieren o no pueden vivir en ellas, aún tendrán que aplicar el Dharma de la mejor manera que puedan a su situación y tratar de hacer que esa situación les apoye de la mejor manera a sus esfuerzos espirituales. Si algunas personas quieren establecer comunidades basadas en familias, como alternativa, por ejemplo, no tengo ninguna objeción al respecto, aunque aún continúo pensando que la comunidad de un solo sexo es el modelo.

Sin embargo, vale la pena enfatizar que una comunidad de un solo sexo no cumplirá automáticamente su potencial simplemente por virtud de ser de un solo sexo. Puede tener mucho más potencial que vivir en el núcleo familiar, pero ese potencial no se va a realizar automáticamente: eso depende del esfuerzo de sus miembros. No es difícil que una comunidad de un solo sexo se degenere en un compartir alojamiento, especialmente si encuentras que la cantidad de personas en la comunidad está disminuyendo y uno tiene que pagar la renta.

P. ¿Y qué hay de las instituciones básicas de la Orden y el Movimiento? Parecería haber un alejamiento de las estructuras que tenemos: obviamente, una menor proporción de personas viven en comunidades o trabajan en negocios éticos, pero también parece que no hay tantos miembros de la Orden que le estén dando tiempo a la enseñanza del Dharma o a ayudar a los Centros. Además, parece que muchos miembros de la Orden no están en capítulos, y muchos capítulos no tienen convocadores de capítulo. Pocas personas asisten a fines de semana de la Orden nacionales y regionales, y la proporción de miembros de la Orden que asisten a convenciones ha ido en disminución. ¿Necesitan repensarse estas instituciones?

S. Creo que sólo necesitan repensarse en el sentido de que algunos miembros de la Orden deberían repensar sus actitudes hacia ellas, si es que han perdido el sentido de esas instituciones. Si algunos miembros de la Orden no se aseguran de tener condiciones que verdaderamente les apoyen en su práctica espiritual, no van a Ir a Refugio de una manera tan efectiva como podrían hacerlo. Es lo mismo si no están trabajando activamente para diseminar el Dharma, especialmente a través de nuestros centros. Y parece que una menor proporción de miembros de la Orden participan activamente en las instituciones de la Orden. Si la tendencia continúa, la Orden simplemente se va a convertir en una especie de sociedad o club social y todos los beneficios de la Orden, tanto para uno mismo como para el mundo, se habrán perdido.

Creo que el problema es que estamos siendo afectados por una tendencia social general hacia la vida privada, con menor y menor participación en el mundo público. Esto es especialmente fuerte en Gran Bretaña. Sin duda, alguna pérdida de inspiración y compromiso entra ahí, y esa pérdida casi ciertamente se incrementará al retirarse de la vida compartida de la Orden. Esto debe de revertirse definitivamente si es que la Orden ha de sobrevivir. La solución está en que los miembros de la Orden individualmente hagan un mayor esfuerzo para participar en la vida de la Orden y el movimiento.

P.¿ No es menos creativa la Orden de lo que era antes? No hay una menor posibilidad de creatividad, especialmente desde que estás tan preocupado por los límites? En los días tempranos no nos preocupaban los límites, estábamos más ocupados con los principios, había mucha mayor libertad.

S. No estaría de acuerdo con mucho de esto. Para comenzar, hay un malentendido sobre la naturaleza de la libertad. La libertad no significa que estés en una posición de hacer lo que te plazca. Creo que allí se encuentra la confusión. Para propósitos prácticos necesitamos ponernos de acuerdo en los límites, de otra manera no podrá haber una Sangha a la cual la gente pertenezca. Los límites, tanto a la entrada como a la salida, son una parte inevitable de crear una Orden, que después de todo es algo distinto. Todos los miembros de la Orden saben esto, puesto que se tomaron la molestia de atravesar los límites de la Orden al ser Ordenados.

En sus días tempranos, la Orden ciertamente era muy creativa, en el sentido de que teníamos que resolver por nosotros mismos los principios básicos y crear las instituciones básicas. Los miembros de la Orden que vinieron después no se encuentran en la misma posición. Pero aún en aquellos días tempranos estábamos “confinados” por lo que el Buda había hecho. Él había descubierto el Dharma de una vez por todas, y en cuanto a este período de mundo le concierne, y nadie podría hacer lo que él había hecho. El Buda en ese sentido fue más creativo, nadie puede igualar la creatividad del Buda. Así, ahora hay una menor creatividad u originalidad, porque una gran parte del trabajo ya ha sido hecho y necesita desarrollarse, más que originarse.

Los primeros miembros de la Orden hicieron algo que, por la misma naturaleza de la situación, los miembros de la Orden posteriores no pueden hacer, aunque pueden hacer algo similar: ir adelante y establecer nuevos centros, comunidades y negocios de subsistencia correcta basados en equipos. Si no desean hacer esto y desean experimentar la creatividad de esos días tempranos, y no desean ser confinados por la AOBO que fue creada hace tantos años, dejémoslos ir, y que inicien su propia Orden. Les aseguro, ¡no es nada fácil!

Hay ahora dentro del movimiento bastante espacio para la creatividad de los miembros de la Orden, en el sentido de iniciativa y originalidad, aún si es de diferente tipo. Pueden ir a algún lugar donde no se conozca la AOBO y pueden ser pioneros ahí: hay muchos pueblos, aún en Gran Bretaña, donde no tenemos actividades aún, así que hay mucho espacio para su creatividad. Pero sospecho que hay muchos que no desean hacer eso. No quieren dejar sus trabajos, su familia, su novia o novio. Se detienen demasiado seguido, de muchas maneras. Quisiera que más miembros de la Orden se volvieran pioneros: ¿porqué es que tantas docenas de miembros de la Orden se arremolinan alrededor de un solo centro urbano cuando podrían estar llevando el Dharma y la AOBO a otros lugares? Si la Orden es menos creativa ahora de lo que era antes, quizá es porque algunas personas no están tan inspiradas y no practican el Dharma tan asiduamente como la gente lo hacía en aquellos días tempranos.

P. ¿Por qué hay una falta de gratitud y aprecio en la Orden hacia lo que hicieron aquellos miembros de la Orden al principio, en vez de sentir que no queda espacio para su creatividad ahora?

S. La gente constantemente expresa su gratitud a mí, tanto por escrito como en persona, por mi trabajo y por lo que han obtenido de sus preceptores y sus amigos espirituales, sus comunidades y sus capítulos, y de hecho de todo el movimiento.

P. Muchas de tus respuestas se han enfocado en tu papel como alguien que define límites, si lo quieres poner de esa manera. Después de ti, por supuesto, aún serás importante para definir los límites a través de tus enseñanzas, pero faltará un elemento clave, que es tu presencia física. Por ejemplo, ahora quien quiera que desee regularizar su posición con respecto a otros maestros puede venir a verte y aclararlo. Y si ven a sus propios Preceptores, aquellos preceptores les podrán aclarar cualquier punto de principios que no les haya quedado claro contigo.

S. Allí hay un gran cuerpo de obra escrita para consultar…

Pero hay algo sobre el movimiento, la Orden e incluso sobre mí que no es fácil de definir. Hay un toque de algo que no puede ser amarrado, algo que a fin de cuentas no puede ser definido. Aun el deseo de amarrarlo o definirlo sería un error – ese fue el error que los Theravadas cometieron en relación con su Vinaya. Todos necesitan proteger ese espíritu más bien misterioso que le da vida y energía al movimiento.

Todos deben desempeñar su papel para mantener vivos a la Orden y al movimiento, especialmente en términos de este elemento indefinible. Pero en última instancia, serán los Preceptores Públicos quienes sean la llave principal, en tanto que son los guardianes de las puertas para entrar a la Orden, y los demás miembros de la Orden deben  cooperar con ellos.

P. ¿Aún tienes confianza en los Preceptores Públicos, colectiva e individualmente?

S. ¡Tengo la suficiente confianza!

 

 


 

 

1 Antinomianismo (del griego ντί, "contra" + νόμος, "ley"), o ausencia de ley (in la biblia Griega: νομία, "fuera de la ley"), en teología es la idea de que los miembros de un grupo religioso en particular no están obligados a seguir las leyes de la ética o Lamoral y que la salvación se da simplemente a través de la fe. (Nota del Traductor K.)